Airbag y cinturón de seguridad: una pareja inseparable

Airbag y cinturón de seguridad: una pareja inseparable

En los últimos años se ha generalizado el uso de airbags en los automóviles. Es importante destacar que este dispositivo de seguridad, de eficacia probada, necesita la acción conjunta del cinturón de seguridad para ser verdaderamente efectivo.

Según estudios realizados en Estados Unidos, donde la incorporación de airbags de conductor y acompañante resulta obligatoria en los vehículos nuevos desde el 1 de enero de 1998, el uso combinado de ambos dispositivos previene un 75 por ciento de lesiones graves en la cabeza y un 66 por ciento en el pecho. Además, los airbags salvaron en los años previos a su incorporación de serie a todos los modelos del mercado americano más de 2.600 vidas, de acuerdo con un informe del Departamento Federal de Transporte.

Riesgos derivados de su mal uso

Aunque su uso resulte siempre recomendable, conviene saber también que el airbag tiene algunos riesgos derivados fundamentalmente de su mal uso.

Como ya hemos adelantado, si un conductor o su acompañante no llevan abrochado el cinturón de seguridad, están en peligro de resultar lesionados por el mismo en caso de que, ante un impacto, se infle la bolsa de aire.

La razón, según explica el Centro Zaragoza, instituto de investigación sobre reparación de vehículos, es que, ante una intensa frenada, en el momento previo a una colisión sus cabezas quedan muy cerca del airbag.

Cuando las bolsas se despliegan, a una velocidad altísima (unos 300 kilómetros por hora), golpean contra las personas antes de haberse inflado del todo.

Sentarse incorrectamente representa otra posibilidad de daños debidos al airbag. Conviene acomodarse siempre a más de 25 centímetros del volante y tener la espalda bien pegada al asiento. Si, por razones de estatura, no es posible guardar esa distancia, los expertos recomiendan instalar extensores de los pedales.

Siempre recomendable

De cualquier forma, y aún en los peores casos, el uso de airbags siempre eleva la protección en caso de colisión.

Regresando a la experiencia americana, de 1,8 millones de airbags activados, sólo en 70 ocasiones se han registrado muertes imputables al dispositivo de seguridad.

Fuente: http://www.micoche.com/articulos/articulos_motor.asp?Id=41