Benditos ratones
Benditos ratones
Durante millones de años los ratones han convivido con el hombre. Hoy esta relación ha rendido frutos. El ratón se ha dejado ver y nos ha revelado las enormes similitudes con nosotros, los seres humanos. En diciembre de 2002 se publicó en la revista Nature, por primera vez, el mapa genético del ratón. Aunque esta investigación arroja datos que ya se imaginaban, no deja de sorprendernos nuestro enorme parecido.
¿Parecido? ¿De qué estamos hablando? Con estos nuevos resultados científicos, se ha comprobado que el 80% de los genes del ratón son idénticos a los del ser humano y el 99% similares. No por nada, podemos decir ahora, los laboratorios médicos prueban sus productos con estos animalitos.
Es por esta última razón, que el descubrimiento del mapa genético del ratón es un gran salto en la historia del desarrollo de la ciencia médica. Las probabilidades de éxito en el camino para encontrar vacunas contra enfermedades crónicas en los humanos se eleva. El modelo del organismo del ratón se ha vuelto clave. Esto quiere decir que los conocimientos que se adquieran con los genes de los ratones permitirán conocer qué genes en los seres humanos originan enfermedades como el cáncer, los trastornos cardiovasculares, el sida y el mal de Alzheimer.
¿En qué consiste este parecido? Se trata del número de genes que tanto el ratón como nosotros tenemos. Y no sólo eso, sino que la composición del ADN es casi idéntica. El ADN es un compuesto químico que se almacena en las células, dirige las actividades de un organismo y transmite toda esta información de generación en generación. En otras palabras, podemos decir que la "memoria" -el ADN- es un elemento compartido entre el ratón y el ser humano.
Los ratones y los seres humanos tenemos casi el mismo número de genes -unos 30 mil-, quedando sólo 300 genes únicos. Los genes son parte del ADN y, como hemos dicho, este compuesto químico es casi idéntico entre los dos mamíferos. El genoma del ratón contiene alrededor de 2 mil 600 millones pares base de ADN, comparado con los 2 mil 900 millones del genoma humano.
Genéticamente hablando, nuestra diferencia con el ratón es mínima. Hoy es una bendición saber esto; porque tenemos la certeza de que los experimentos con ratones, en todo lo relacionado con el avance de la ciencia médica, nos ayudarán de manera directa.
Fuente: http://sepiensa.org.mx/contenidos/p_ratones