Laboratorio de Lingüística Forense

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Laboratorio de Lingüística Forense

El Laboratorio de Lingüística Forense (ForensicLab) del Institut Universitari de Lingüística Aplicada (IULA) es un centro de la Universitat Pompeu Fabra que desarrolla actividades formativas y de investigación en lingüística forense, y de servicio en peritaje lingüístico con finalidad forense. Forma parte del grupo de investigación consolidado por la Generalitat de Catalunya (SGR2005-00272), Unidad de Variación Lingüística (UVAL), cuyas actividades se estructuran alrededor de la Teoría de la Variación y el Cambio Lingüísticos, modelo que atribuye la validez interna y externa necesarias para llevar a cabo actividades de formación, investigación y peritaje en lingüística forense.

Definición de Lingüística Forense

La lingüística forense se puede definir de forma general como la interfaz entre lenguaje y derecho. Esta disciplina lingüística incluye toda una serie de áreas de investigación y estudio que están relacionadas con el uso de la evidencia lingüística en distintos ámbitos, entre los que destacan los siguientes:

* El uso de evidencia fonológica, morfológica, sintáctica, discursiva y terminológica para identificar hablantes de una variedad lingüística determinada, estilo o registro.
* El análisis de la imitación en la producción de textos con finalidades criminales.
* La determinación/atribución de autoría, tanto de textos orales como escritos, y la detección de plagio.
* La comprensión lectora de los documentos legales.
* El discurso legal y judicial.
* La interpretación y traducción legal, judicial y de apoyo en contextos multilingües.

Existe una definición amplia de lingüística forense que cubre todas estas áreas en las que el lenguaje y el derecho se interrelacionan, y una definición restrictiva que se refiere especialmente a la utilización de evidencia lingüística en los juicios y, por tanto, a la actuación de los lingüistas en contextos jurídicos y judiciales. La revista científica Forensic Linguistics: The International Journal of Speech, Language and the Law sigue la definición amplia con artículos sobre discurso legal y judicial, interpretación judicial, y también artículos sobre fonología y fonética forenses, determinación/ atribución de autoría y detección de plagio, con medidas fiables de los datos a través de herramientas informáticas y métodos estadísticos. La International Association of Forensic Linguists, como asociación, también sigue la definición amplia y, por lo tanto, en sus congresos acepta comunicaciones sobre un abanico muy amplio de temas sobre lengua y derecho. La página Web de la Asociación también sigue esta definición amplia, y de hecho parece que sólo es en el ámbito judicial y en los juicios que se utiliza la definición restrictiva, en beneficio de los profesionales del derecho que necesitan poder contar con estudios de expertos en temas lingüísticos y utilizarlos como prueba.

Desde el punto de vista metodológico, en la mayoría de casos la lingüística forense utiliza técnicas derivadas de las nuevas tecnologías, es decir, que el desarrollo de la investigación y el servicio en lingüística forense se realiza habitualmente a partir de un conjunto de herramientas informáticas y técnicas estadísticas que posibilitan opiniones, actuaciones y asesoramiento científicos y profesionales de alta competencia y fiabilidad por parte de los lingüistas forenses, para su posterior utilización desde distintas instituciones y organismos públicos (escuela judicial, ministerio fiscal, policía) y privados (empresas), y para profesionales diversos (jueces, abogados defensores, psicólogos, médicos). En cualquier caso, las pruebas periciales que se presentan no son nunca pruebas definitivas ni concluyentes, sino más bien complementarias de otros tipos de evidencias o bien para introducir una duda razonable.

Breve historia

Durante los años 60, 70 y 80, sobre todo en los EE.UU. y Canadá, abogados, policía judicial y otros profesionales dedicados a la investigación del crimen habían solicitado la intervención de los lingüistas como expertos en temas relacionados con el derecho y la lengua. No obstante, esta práctica profesional fue aislada y poco cohesionada metodológicamente, y sus resultados fueron publicados de forma muy dispersa.

A partir de los años 90 se producen una serie de cambios que justifican la denominación de una nueva área temática, la Lingüística Forense. En primer lugar, hay mucha más demanda de servicios en lingüística forense y la actuación de los expertos es mucho más profesionalizada. En segundo lugar, cabe destacar que se extiende la publicación de textos y colecciones de artículos y capítulos de libro en lingüística forense, que reflejan una metodología coherente y consensuada internacionalmente. En tercer lugar, hay que destacar la creación de la International Association of Forensic Phonetics (IAFP) (St. John's College, York (1991)), que actualmente se denomina International Association of Forensic Phonetics and Acoustics (IAFPA), y de la International Association of Forensic Linguists (School of English, University of Birmingham (1992)). Finalmente, hay que remarcar la publicación, en 1994, del primer número de la revista, Forensic Linguistics (actualmente: The International Journal of Speech Language and the Law), que ya cuenta con 15 números.

Fuente: http://www.iula.upf.edu/forensiclab/fpreses.htm

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